En ese tiempo, «Pelusa» encabezó la campaña «Sol sin drogas» en Pinamar, donde el fotógrafo cubría la temporada.
José Luis Cabezas murió asesinado con dos disparos y su cuerpo fue calcinado dentro del auto que utilizaba para trabajar en Pinamar. Era el reportero gráfico de la Revista Noticias. Un año antes había logrado, con una foto, sacar del anonimato a Alfredo Yabrán, empresario dueño de OCA.
A los pocos días del homicidio, se realizó en Mar del Plata una marcha de reporteros gráficos y familiares que exigían justicia por José Luis Cabezas y que avancen con la investigación contra los culpables.
De pretemporada con Boca, allí dijo presente Diego Maradona, que cuestionó directamente al poder político y a las autoridades.
Jose Luis Cabezas conocía a Maradona porque en diversas oportunidades le tocó fotografiar al deportista. La última vez que lo retrató fue en 1996 en una campaña financiada por el Gobierno Nacional en Pinamar donde el fotógrafo cubría la temporada. La iniciativa llevaba el nombre de “Sol sin drogas” y en la imagen se lo ve cabeceando la pelota rodeado de menores desesperados por saludar al máximo ídolo.